Gobierno cubano teme deserciones en el fútbol
Jugar partidos en los Estados Unidos ofrece a los jugadores la oportunidad de escapar y buscar fama en el extranjero.
Gobierno cubano teme deserciones en el fútbol
Jugar partidos en los Estados Unidos ofrece a los jugadores la oportunidad de escapar y buscar fama en el extranjero.
A pesar de que la selección nacional de fútbol de Cuba está jugando uno de los torneos regionales más importantes, los seguidores no pudieron ver los juegos en vivo. La televisión estatal ha estado transmitiendo los partidos de manera diferida, aparentemente para cuidar la imagen ante un caso de jugadores que aprovechen para desertar en los Estados Unidos, el país anfitrión.
Por ejemplo, los televidentes tuvieron que esperar hasta el 12 de julio para ver el debut de Cuba contra Costa Rica, tres días después de que fuera el juego.
El equipo cubano está jugando en la Copa de Oro de la CONCACAF, una confederación que agrupa a Estados Unidos, Canadá, México, Centro América y los países del Caribe.
Aunque la transmisión diferida ha sido una constante en los pasados campeonatos de la Copa de Oro, los seguidores mantienen la esperanza debido a las recientes transmisiones de equipo de Cuba en la Copa Mundial Sub-20 de la FIFA, celebrada en Turquía y los juegos de la Copa Confederaciones de la FIFA en Brasil.
Sin embargo, cuando llegó la Copa de Oro, el canal estatal TVC decidió transmitir en su lugar el Campeonato Nacional de Boxeo y también la Eurocopa Femenina de Fútbol, en la que no hay participación cubana.
Mario Lara, administrador del “Blog del Fútbol Cubano”, dijo que las transmisiones en vivo podrían dejar a las autoridades mal paradas si alguno de los jugadores desertará.
“[En Cuba] siempre se ha tratado de esconder este tipo de cosas. En este aspecto siempre se ha vivido del rumor y cuando por fin se corrobora, ya el asunto está frío y olvidado”.
En cuatro de los seis previos campeonatos de la Copa de Oro en los cuales la selección nacional ha participado, siete jugadores aplicaron a la residencia en Estados Unidos. En total, 26 futbolistas cubanos se han convertido en lo que el gobierno llama “desertores”, en los últimos 14 años.
El gobierno de Estados Unidos ofrece la residencia a cualquier cubano que logré llegar a territorio norteamericano. Estos es parte de la política de “pies secos, pies mojados”, mediante la cual los nacionales cubanos son devueltos si son interceptados en el mar, pero se mantienen seguros una vez que llegan a tierra.
Entrar a Estados Unidos para jugar los partidos, es pues, una oportunidad tentadora para un futbolista profesional cuyos horizontes están limitados en casa.
Maykel Galindo y Osvaldo Alonso, quienes desertaron en 2005 y 2007 respectivamente, consiguieron lucrativos contratos con la Major League Soccer (MLS) en Estados Unidos.
Las preocupaciones oficiales sobre posibles deserciones se reflejaron también en la selección de los jugadores con menos experiencia para el equipo de la Copa Oro, y el hecho de no participar en partidos de práctica para el que es considerado el campeonato regional más importante.
Las estrellas en ascenso, Marcel Hernández y Domingo Francisco, fueron retirados de la escuadra por supuestos problemas de rendimiento deportivo. El canal internacional de deportes ESPN sugirió que la verdadera razón era que podían desertar.
Un comentario publicado en el “Blog del Fútbol Cubano” señala que en la Copa Oro, “las expectativas pasan menos por los resultados en sí, que por saber cuáles futbolistas aprovecharán esta oportunidad para ir tras sus sueños en suelo norteamericano”.
Nico Cervantes es el seudónimo de un periodista cubano.
Este artículo fue publicado por primera vez en el sitio web de IPWR.
